La tormenta había pasado, el paramo yacía desierto y vacio, la batalla contra los elementos había terminado, no así la batalla que en un refugio cercano un hombre había mantenido contra si mismo. Fué una noche muy larga, la ira y el odio se entremezclaban con el retumbar de los truenos que violentamente caían sobre la tierra, el remordimiento y la tristeza azotaban su alma al ritmo con el que la lluvia mojaba desesperada las hojas de los arboles, antes de caer al suelo y terminar así su camino. Sus hombros se agitaban estruendosamente al mismo tiempo que el viento se colaba por una rendija de la cueva. La vida al igual que el calor de su cuerpo, se escapaba lentamente, era inevitable como la caida del agua recogida entre las manos...
El tiempo escapa,la vida se desvanece,la mirada de sus ojos perdida en la tranquilidad de un mar imaginario...perdida...
La muerte aparece para recogerle pero en una burla mas, esta se niega a darle el descanso eterno sabedora de que el infierno no es comparable al tormento y la desesperacion que le produce el aun seguir vivo. En el fondo de su pecho aun todavia late el corazon del guerrero que una vez fue, roto ahora en mil pedazos por el desgaste de luchar por todo y no conseguir nada, por luchar contra el mundo mientras que en su interior lucha contra sus instintos y el yo que la desesperanza ha creado. "El descanso es para los cobardes y tu aún tienes mucho que hacer en este mundo" le susurraba lejano su corazón. Nunca quiso llevar la capa de soledad que le acompaña ni poseer ese aura de soledad que sus ojos vacios de sentimientos muestran al mundo, la tristeza en su interior es infinita e inifinito es el tormento que el seguir respirando causa en su corazon ajado...
Una vez mas se levanta y comienza a andar, su cara muestra la ausencia de quien a visto tanto en la vida que lo siguiente por descubrir esta en su interior, su cuerpo refleja el calor de la lucha que comienza de nuevo en su interior y sus pasos sin destino y sin origen demuestran que la vida y la muerte no son mas que absurdos puntos de vista de quien ve marchar lo mas querido sin poder remediarlo. La muerte es la siguiente parada en su camino pero...¿cuando llegara?
domingo, noviembre 13, 2005
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